mas no siempre poco cuestionado.
Tú, que lo sabes todo y sabes perfectamente a quién ignorar.
A ti, que pareciese siempre estás de una manera tan ausente,
que surges entre todo y nada a la vez,
guía inexorable del mapa perdido de cada universo,
luz que ante los ciegos no deslumbra,
a tu fuerza y poder que da mi fe.
Te pido me devuelvas mi vida.
Esa que ahora está entre la muerte agónica de mis ganas,
de mi voluntad, de mis sueños, de mi sentido.
Grito en silencio ¡Volver o morir!
No creer, no saber... no sentirme.
Ya no quiero estar vivo
en mi cotidiano morir,
en mi detestable resurrección cada mañana.
¡Valida ahora!
lo que parece ser cierto.
Ya no quiero estar vivo
en mi cotidiano morir,
en mi detestable resurrección cada mañana.
¡Valida ahora!
lo que parece ser cierto.
Noviembre 1 de 2006
No hay comentarios:
Publicar un comentario